¿Te has fijado en la cantidad de gente que este año ha apostado por un traje de baño para ir a la playa en lugar un bikini? Toma nota porque el traje de baño deja de estar en el top of mind de las mayores de 50 y baja su media de edad ¡¡en más de la mitad!! Los trajes de baño siempre han estado en nuestra armario, los llevábamos de pequeñas y nos sentimos como verdaderas mujeres adultas cuando pasado al dos piezas pero ¿por qué no volver a usarlo hoy? El primer bikini del mundo, que vio la luz en los años 40, recibió el nombre de “Átomo, el traje de baño más pequeño del mundo”, pero no fue hasta que Micheline Bernardini lo lució en París cuando se dijo de ella que era "más explosiva que la bomba de Bikini", refiriéndose a las pruebas nucleares que EEUU realizaba en las Islas Marshall. Desde ese momento el bikini ha evolucionado, ha mostrado más y menos, ha sido de talle alto y bajo, con escote palabra de honor o con tirantes a la espalda… Decir bikini significa abrir un infinito mundo de posibilidades que permitieron a la mujer liberarse, mostrar su cuerpo y sentirse sexys. Además, nos sienta de maravilla y nos vemos guapísimas con ellos. Pero ¿y el traje de baño? ¿Quién no recuerda a las vigilante de la playa enfundadas en aquellos calados trajes de baño rojos? ¿no era eso incluso más sexy que un bikini? Y con este razonamiento vuelven a nuestros armarios; eso sí, calados, con escote y espalda infinita. Las expertas aseguran que realza más la figura, que sus piernas parecen más largas y que las caderas se acentúan; además combinados con unos shorts quedan de infarto. Y tú ¿por cuál te decantas?